Contribución de la Dra. Isabel Errázuriz

GUÍA PRÁCTICA PARA EL CUIDAD DE LA PIEL, PELO Y UÑAS

La piel está compuesta por células superficiales dañadas en proceso de eliminarse (que producen el aspecto escamoso a la piel), y de células sanas más profundas (que son las que se van regenerando y produciendo las más superficiales). Todos los días las células superficiales mueren y son reemplazadas por otras más jóvenes. En la medida que envejecemos,  este proceso se hace más lento y menos efectivo, por ende,  la piel se hace más seca y escamosa.

Los mecanismos para rejuvenecer la piel consisten en estirarla (La Cirugía). Hay otros procedimientos que intentan eliminar parte de la capa superficial seca y escamosa. Estos mecanismos pueden ser mecánicos (Dermabrasión o Micro Dermabrasión), con láser (que produce el mismo efecto mediante una “quemadura controlada”, o químicos, con ácidos fuertes o cremas exfoliantes.

El tratamiento consiste en causar un daño controlado a las células superficiales produciendo su destrucción y caída uniforme. Esto permite que las células jóvenes emerjan a la superficie cuando aún están frescas y sanas.

El objetivo es disminuir las asperezas, darle más luminosidad y brillo, disminuir el tamaño de los poros, reducir las manchas y dar una apariencia saludable. Los resultados se ven a partir de varios meses luego del tratamiento.

Los programas para el cuidado de la piel usualmente constarán de varias etapas, así:

  • Exfoliación
  • Estimulación
  • Medicación
  • Protección

Este programa se logra mediante aplicaciones de cremas de limpieza, ácido Alfa hydroxy, retin-A, agentes blanqueadores como Hidroquinonas, bloqueadores solares y humectantes.

Cremas de Limpieza

Se aplica diariamente para eliminar la capa superficial de células muertas, lo que facilita la penetración de estimulantes tales como ácido Alfa hydroxy y retin-A.

Ácido Alfa hydroxy: Son ácidos naturales que estimulan el crecimiento y recambio de las células de la piel.

Retin-A. Estimula la circulación en la piel facilitando su crecimiento y recambio. Engrosa las capas internas generando luminosidad, lozanía y suavidad. Ayuda a reducir las arrugas delgadas pero no así las arrugas más profundas. Puede producir un poco de irritación o resecar la piel por lo que se recomienda algún humectante.

Agentes depigmentantes o blanqueadores: Pueden ser útiles en la prevención y tratamiento de la piel descolorada o manchada, uno de estos agentes son las Hidroquinonas, que suprimen parcialmente la actividad de las células que producen pigmentos.

Humectantes: Estos mantendrán su piel sana y suave mientras se renuevan las células viejas. También ayudan a tolerar los efectos deshidratantes de la Retin A.

Bloqueadores Solares

Los tratamientos de cuidados a la piel hacen que ésta esté más propensa al daño y las quemaduras producidas por la exposición solar.

Son indispensables para la mantención de una piel sana porque nos protegen de los efectos nocivos del sol, tanto en envejecimiento como de prevención de Cáncer de la Piel.